Málaga en el siglo xviii

    Málaga 26 de Noviembre de 2010

 

Recorriendo los rincones de la pequeña ciudad de Málaga Raúl se perdía.Le encantaba pasar las tardes en alguna tetería contando historias de sus andanzas de joven.En ellas se encontraba a si mismo y al mundo que lo rodeaba.Sus amigos se quedaban boquiabiertos escuchándolos sin parpadear.

Eran historias de un tiempo donde las gentes se movían en bicicleta,a pie o caballo.Cuando los carruajes eran los sonidos mas usados en las calles y las gentes se movían con trajes largos,sombreros de copa y perfumes aterciopelados.Allí los tratos en  bares,el juego de cartas,las damas o dardos eran lo predominante.Lo que hoy llamaríamos tiempo de ocio.

En ese entorno Rául se hubo criado cuando un día del mes de Noviembre de 1753 cambió todo.Allí en la taberna "El Toro Loco" donde los ciudadanos pasaban parte de sus días,entró un hombre de unos 45 años.
Un forastero alto con botas blancas y sombrero de cowboy que desde que entró ya estaba pidiendo un whisky.Burbon,a ser posible.Dijo con tono amenazador al camarero.

Escupió el palillo de dientes masticado, y pegando un salto se colocó en la barra.Tomose de un trago el brevaje y dirigiéndose a los presentes comentó:"Hoy es un día especial para todos ustedes pues me he hecho cargo como gobernador de esta ciudad.Así que les tengo que decir que las leyes aquí van a cambiar,la forma de actuar y de ser en esta ciudad será totalmente diferente a lo que conocen ,a partir de ahora.Ni mejor,ni peor,DIFERENTE.¡Es todo lo que por ahora tengo que decirles¡.El resto ya se los iré contando.No admito preguntas de momento.Es todo.Hasta pronto."

El revuelo que allí se formó cuando se marcho fue tremendo.Todo el mundo asustado preguntándose muchas cosas,discutiendo,chillando......

jas